En la actualidad, la elaboración de artículos es una parte esencial del trabajo de un investigador. Como he leído repetidamente en los textos relacionados con el tema, un trabajo científico no se puede considerar terminado a menos que haya sido publicado. Pues este debe ser el principal objetivo de la investigación: poder compartir los nuevos conocimientos con la comunidad científica, para que ésta pueda leer, entender y tener a su disposición estas nuevas averiguaciones.
Hasta ahora no he tenido la oportunidad de
redactar ningún artículo original sobre mi trabajo para publicarlo en una
revista. Sin embargo, he tenido que redactar el trabajo de Fin de Grado y el de
Fin de Máster y, como no podía ser de otra manera, el trabajo debía tener la
estructura típica de un artículo científico, IMRAD.
Como dificultad general que me encontré a lo
largo de toda la redacción de ambos trabajos, fue la de ser conciso y breve. Me costaba encontrar las palabras correctas
para explicar lo que quería sin alargarme demasiado. Y creo que este ejercicio
es muy importante ya que las revistas científicas tienen número limitado de
palabras para cada artículo y uno está obligado a ajustarse a lo que piden. Además,
el texto debe ser claro, sin palabras complejas y para esto creo que es
esencial darse cuenta de a quién va dirigido lo que estamos escribiendo.
Más en particular, la parte de redacción que
encontré más difícil fue la discusión de los resultados. En el texto
recomendado para leer esta semana, el autor comenta que para él la parte más
fácil para comenzar a redactar un artículo son los resultados y después, la
discusión de los mismos. En mi caso, en ambas situaciones, yo empecé redactando
la introducción. Pienso que quizás al no estar acostumbrada todavía a la
redacción en inglés de este tipo de trabajos, esta parte me resultó más
sencilla pues tras leer mucha literatura te puedes hacer una idea de cómo
estructurar tu introducción. En la discusión sin embargo, caía en el error de
volver a describir demasiado mis resultados. En esta parte hay que explicar qué
significan los hallazgos a los que se alude en la sección de resultados y de qué
manera inciden o cómo se relacionan con lo que se conocía hasta entonces. Es lo
más importante del artículo ya que ahí justificas qué estás aportando nuevo a
tu campo. Para mí fue lo más complicado del trabajo. Al final, con la ayuda de
mis tutores y sobre todo, leyendo muchos otros trabajos relacionados con mi
proyecto, conseguí redactarlas y además, acabarlas con una conclusión general
sobre el trabajo.
Para acabar, quería hacer hincapié en la
importancia de la documentación científica. El acceso que tenemos hoy día a la
información científica facilita muchísimo el trabajo de un investigador, le
ahorra trabajo y le permite estar al tanto de los últimos descubrimientos, ya
sea en su campo o en otro. Y esto se lo
debemos al desarrollo de nuevas tecnologías, bases de datos, etc. que permiten
que en un ‘’click’’ tengamos a nuestra disposición gigas y gigas de información.
Y es que, como dice el texto de J.R.
Pérez Álvarez-Ossorio, ‘’la información
es poder’’.
Concuerdo plenamente contigo, lo más difícil es presentar los resultados de forma concisa y contundente.
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ResponderEliminarQuizá ayuda tener claro el hilo conductor de la narración. En los papers (no tanto en los PFG, PFM) es la conclusión lo que guía el texto. ¿Qué has descubierto que es nuevo e interesante? Eso será la conclusión del artículo y debe quedar claro en el título. Seguramente uno tiene muchos más resultados de los que hacen falta para "probar" la conclusión (resultados preliminares, de cuando no lo tenías tan claro, menos limpios, mezclados con otras variables, etc.). Pues se descartan. En la publicación hay que poner los que mejor sirven para el propósito final, dejar bien sustanciada la conclusión.
ResponderEliminarYo creo que la dificultad para presentar resultados surge de la ausencia de un propósito claro. Eso te lleva a intentar poner todo lo que has hecho pra que se valore el esfuerzo hecho. Pero al que lo lea no le va a importar tu esfuerzo, sino tu descubrimiento.
Bueno, o al menos yo lo veo asó. Como todo, es muy opinable.